viernes, 11 de diciembre de 2020

TEMAS MUNICIPALES BOLETÍN Nº 48 DE VEÏNS PER SANT FELIU



 

Contrata de Jardinería, el gran debate: CONTINUISMO O CAMBIO DE ESTRATEGIA



Ante el nuevo contrato del servicio público de jardinería, el grupo municipal de Veïns per Sant Feliu ha venido  presentando alternativas de cambio estratégico en el Pliego de Condiciones Técnicas. Aportaciones que tienen por objetivo racionalizar la calidad del servicio, reducir los costes económicos de la contrata,  al tiempo que ofrecer mejoras a las quejas e insatisfacción ciudadana.

El    equipo  de  gobierno  nos  promete    mejorar  la  jardinería  cuando  la realidad  es dar  continuismo  en todos los conceptos al caducado Pliego de Condiciones Técnicas.

No escuchan   las críticas y aspiraciones ciudadanas, no analizan nuestras propuestas, ni tampoco      las recomendaciones realizadas por la Interventora Municipal o  las de la  auditoría de diciembre de 2018 .

La tramitación de este Pliego ha sido de total fracaso para el equipo de gobierno:

Tuvo que retirar el Pliego en el Pleno Municipal de noviembre 2019.

Los acuerdos en los   Plenos de enero y  de abril de 2020  han sido nulos por las alegaciones y la impugnación d el Gremio de Jardinería de Catalunya.

Ha   tenido   que   hacer   dos   prorrogas   forzosas   con   las   empresas adjudicatarias sin haberlas negociado.

Han tenido que hacer dos modificaciones al proyecto inicial.

Ahora, tiene que volver a presentarlo en un nuevo Pleno municipal para su aprobación.

Nuestro grupo municipal, a pesar de la falta de interlocutor por parte del equipo de gobierno, ha presentado 21 alegaciones y volvemos  a replantear el  tema    porque consideramos que es un problema    de  gran interés para los ciudadanos.

lunes, 7 de diciembre de 2020

LA DEUDA PÚBLICA: ¿PUEDE UN ESTADO, UN MUNICIPIO, ESTAR SIEMPRE ENDEUDADO?.

¿QUE ES LA DEUDA PÚBLICA?

La deuda pública de un país es la deuda de todo el conjunto de las administraciones públicas. En España corresponde a la suma de la deuda del Estado central, de las 17 comunidades autónomas y de los municipios.

NECESIDAD DE ENDEUDARSE

En los presupuestos que anualmente realizan los países, las comunidades y los ayuntamientos, se determinan una serie de gastos y su forma de financiación que generalmente es a través de los impuestos que se recaudan (ingresos). Si los gastos superan a los ingresos se necesita financiación añadida y eso se consigue pidiendo prestado, es decir endeudándose. En ocasiones ese mayor incremento de gasto está justificado pues pensemos en catástrofes naturales, en epidemias como la que acontece desde finales del año 2019 (COVID-19), pero en otras ocasiones la mala administración de esos ingresos produce un déficit sostenido  (mayores  gastos que ingresos, año tras año ) con lo que cada vez necesitamos endeudarnos más.

La deuda se mide en porcentajes del PIB del país. En el gráfico adjunto, de los países pertenecientes a la UE, se observa que muchos de ellos tienen una deuda por encima o muy cercana al 100% del PIB, entre ellos España. Destaca Grecia con una deuda en el año 2019 próxima al 180%.

En valores absolutos la deuda de España asciende más o menos a 1,2 billones (con “b”) de euros. La línea amarilla es la recomendación que hace la UE para determinar donde debería situarse la deuda de los países debiendo ser ésta como máximo el 60% del PIB.

HISTORIA DE LA DEUDA ESPAÑOLA

La pérdida de las colonias en América en el primer cuarto de siglo XIX dejando a España sin los metales preciosos, así como los diferentes conflictos bélicos y las guerras contra Francia y Gran Bretaña dejó la deuda, según datos del FMI, en un 161,72 % del PIB. En el siglo XX y con el fin de financiar las guerras para intentar mantener lo que quedaba del Imperio Español, es decir Cuba y Filipinas, el rey Alfonso XII gastó ingentes cantidades de dinero. La financiación de las guerras siempre han incrementado las deudas de los países. No sólo España se ha endeudado sistemáticamente, otros países importantes como Alemania, Francia o Italia se han endeudado fuertemente a través de su historia.

La crisis del petróleo de 1979 (segunda crisis, la primera fue en 1973) como consecuencia de la revolución iraní y de la guerra Irán-Irak provocó que el precio se multiplicara por 2,7 veces. La fuerte dependencia de España de este producto provocó un incremento de la deuda pública.

En el año 2007 la deuda pública española apenas alcanzaba el 36% del PIB. Desde entonces como consecuencia de la crisis inmobiliaria y los créditos subprime la deuda ha ido creciendo año tras año. Este año 2020 y como consecuencia de las necesarias ayudas provocadas por la pandemia se estima que el porcentaje pueda alcanzar el 120%.

Por el mismo motivo, crisis inmobiliaria, las comunidades autónomas también han visto incrementada su deuda, destacando la Comunidad Valenciana con una deuda del 42%. La de Catalunya es del 33,40% al cierre del año 2019.



Para un mejor entendimiento de los porcentajes de deuda de las Comunidades Autónomas se adjunta un cuadro con el PIB de cada una de ellas del año 2019.


NUESTRO MUNICIPIO

La crisis inmobiliaria afectó también a nuestro municipio alcanzando el pico más alto de deuda en el año 2011. A partir de entonces la deuda ha ido disminuyendo hasta los actuales 15,3 millones de euros al cierre del año 2019.

La deuda se mide en porcentaje sobre los ingresos corrientes (capítulos 1 al 5). La de nuestro ayuntamiento se sitúa en el 36,34%.La Ley Reguladora de las Haciendas Locales establece un porcentaje máximo del 75%.

Fuente: Ayuntamiento de Sant Feliu de Llobregat



SOSTENIBILIDAD DE LA DEUDA PÚBLICA

¿Cuál es el umbral de esa deuda desde el que a partir de entonces la deuda se hace insostenible? Pues será el umbral a partir del cual la deuda se convierta o empiece a convertirse en impagable no habiendo un umbral tipo. Así por ejemplo Japón tiene una deuda del 257% de su PIB, porcentaje que provocaría  solicitar un rescate a más de un país. Por tanto la sostenibilidad dependerá de su estabilidad y de su decrecimiento a lo largo del tiempo. Es decir del control del déficit primario  (ingresos menos gastos antes de intereses) año tras año, porque no hay que olvidar que, puede que se renegocien los vencimientos, aplazándolos, pero sin embargo los intereses deben pagarse por lo que otro factor a tener en cuenta será el tipo de interés de esa deuda y sin lugar a dudas si la deuda de un país empieza a crecer mucho los compradores de esa deuda y en función de los indicadores económicos del país, pueden dudar de la sostenibilidad y pedir mayores intereses por ese mayor incremento de deuda, que fue lo que ocurrió en España en el año 2012.

¿ES SOSTENIBLE LA DEUDA PÚBLICA ESPAÑOLA?

Según un informe de noviembre de 2019 emitido por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), decía que “no habiendo cambios en las actuales expectativas en el mercado de deuda soberana y si la política monetaria se mantiene inalterada,…, y en el escenario normativo (que implica a corregir el déficit estructural), la ratio de deuda pública podría estabilizarse en el entorno del 60% del PIB en 15 años”. Situándonos pues en noviembre de 2019, todo apuntaba a que España iba a ir en los próximos años corrigiendo el déficit estructural (ingresos menos gastos) para de esa forma ir disminuyendo el peso de la deuda sobre el PIB. Por tanto, hasta esa fecha podríamos decir que la deuda pública española era sostenible dada esa coyuntura económica. En el año 2020 por causas de la pandemia se han tenido que hacer frente a una serie de gastos extras lo que provocará un incremento de la deuda estimándose que a final de año alcance un 120% del PIB. La sostenibilidad dependerá entonces en saber manejar esas cifras planificando un futuro en el que seamos capaces de controlar y de ir disminuyendo sin prisa, pero sin pausa, los continuados déficits anuales que van a ir produciéndose.

Por consiguiente y para concluir:

¿PUEDE UN ESTADO, UN MUNICIPIO, ESTAR SIEMPRE ENDEUDADO?

Por todo lo visto anteriormente siempre que esa deuda esté bajo control, que sea una deuda que tienda a estabilizarse y/o a ir decreciendo aunque sea de forma liviana en el tiempo podríamos decir que sí, que un estado, un municipio, una comunidad, podría estar eternamente endeudada. Ahora bien no debemos perder de vista que la deuda tiene un coste financiero, es decir que obliga a pagar unos intereses por ella, y que aunque en la actualidad los tipos de interés son muy bajos, es un gasto, y muy elevado para algunos países, al que hay que hacer frente y no deja de ser un dinero que podría utilizarse en otras opciones más productivas.

Juan Bonilla, membre del Col•legi d’Economistes de Catalunya i col•laborador en temes econòmics del grup municipal Veïns per Sant Feliu.