ANÁLISIS
DEL PIB DE ESPAÑA
El pasado día 28 de enero el
Instituto Nacional de Estadística (INE) publicaba un avance con los datos del
cuarto trimestre del Producto Interior Bruto (PIB) del año 2021.
Producto interior bruto
Volumen encadenado. Tasas de variación interanual (%)
Supongamos que la producción
del año 2021 ha sido la fabricación de tres vehículos y su precio es de 45.000
euros, es decir 15.000 euros cada vehículo. En el año 2020 la producción fue la
misma es decir tres vehículos, sin embargo el precio fue de 30.000 euros, es
decir 10.000 euros cada vehículo. Diremos que el PIB del año 2020 fue de 30.000
euros y el PIB del año 2021 de 45.000 euros. ¿Quiere este decir que hemos
crecido en términos reales? Claramente no. La producción del año 2021 ha sido
igual a la del año 2020 esto es la fabricación de tres vehículos lo que ocurre es
que en el año 2021 se han incrementado los precios en un 50%. Podría parecer
pues que este año 2021 hemos crecido un 50% más que el año 2020 y sin embargo
no ha sido así. Utilizando el deflactor del PIB (inflación) observamos que la
producción ha sido la misma.
Debemos diferenciar pues los
precios corrientes, que son los precios actuales de un producto (precios
nominales), de los precios constantes, que son los precios que tienen en cuenta
la inflación.
PIB
Y DEUDA PÚBLICA
El porcentaje de Deuda
Pública sobre el PIB se calcula sobre el PIB nominal, es decir sobre el PIB a
precios corrientes, sobre los 1.202.994 millones de euros.
Hasta el mes de septiembre la deuda total de las administraciones públicas representaba el 122,1 % sobre el PIB a ese mismo mes. La deuda acumulada al mes de noviembre, según datos del Banco de España, es de 1.426,26 miles de millones de euros. Supongamos que no se ha incrementado la deuda durante el mes de diciembre (dato que conoceremos durante el mes de febrero) por tanto el porcentaje de la deuda sobre el PIB sería del 118,6% (Deuda dividido por PIB). Sin embargo si el cálculo lo efectuamos sobre el PIB deflactado ese porcentaje se incrementa hasta el 121,1%.
La caída del PIB de España
en el año 2020 fue del 10,8%, siendo el país de la Unión Europea que mas cayó.
Los países cuya caída fue menor están tardando menos en recuperarse y alcanzar
niveles del año 2019 (algunos ya lo han hecho como Alemania).
Imaginemos que en el año 2019 todos los países de la Unión Europea están en el piso once de un edificio. Crecer significa ir subiendo pisos en el edificio. Llega el año 2020 y los países van cayendo pisos hacia abajo. Algunos descienden hasta la planta diez otros hasta la planta nueve y España hasta la planta ocho. Durante el año 2021 algunos países no sólo han alcanzado ya la planta once sino que incluso han llegado hasta la planta doce. Estos países son los que realmente están creciendo, pues su situación en el año 2019 era la planta once. Otros sin embargo como España todavía no han alcanzado esa planta, por tanto no está creciendo, se está recuperando de aquella caída a la planta ocho que sufrió en el año 2020.
CONCLUSIÓN
Las noticias son buenas y
esperanzadoras. España se recupera aunque no al ritmo que nos gustaría. Las
cifras de empleo mejoran y la tasa de paro ha disminuido hasta el 13,3% según
la última encuesta de la EPA, pero por los datos que hemos visto no es oro todo
lo que reluce. Tener ese alto porcentaje de paro es motivo de profunda preocupación.
Se ha reducido la tasa y es una buena noticia, pero no es motivo de alarde.
Los partidos de coalición
que gobiernan España, insisten en que vamos bien en que estamos creciendo más
que los países de nuestro entorno y que la Deuda Pública está controlada. Como
hemos visto ambas afirmaciones son puras falacias. Si medimos el porcentaje de
la deuda sobre el PIB real es mayor que si lo hacemos sobre el PIB nominal, por
eso es que como hemos comentado en otras ocasiones para los partidos que
gobiernan no es tan mala la inflación pues se incrementa el PIB nominal y
disminuye el porcentaje de deuda. Y por otra parte no estamos creciendo como
así demuestran los números, nos estamos recuperando. Creceremos cuando
alcancemos y superemos la cifra del PIB del año 2019.
Por consiguiente, una vez más se demuestra que nuestros gobernantes lo que quieren es apalancarse en el poder utilizando las palabras y los números de la forma más favorable para ellos en lugar de explicarlo de manera objetiva para que cada cual razone y obtenga sus propias conclusiones.
Juan Bonilla, membre del Col•legi d’Economistes de Catalunya i col•laborador en temes econòmics del grup municipal Veïns per Sant Feliu
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